También conocidas como los crepes de mil agujeros, el baghrir es una fina tortita de sémola con una textura esponjosa y sabor delicioso. La levadura hace que se formen docenas de agujeros en la superficie del baghrir, lo que lo hace blando y suave.
Descubrirás 2 fáciles recetas, una con sémola (la original) y otra variante sin sémola.
Baghrir con sémola
Ingredientes
- 1 taza de sémola.
- 1/2 taza de harina.
- 1 cucharadita de levadura instantánea.
- 2 cucharaditas de levadura en polvo.
- 1 cucharada de azúcar.
- 2 tazas de agua tibia.
- Un poco de sal.
Preparación
- Ponemos todos los ingredientes en la licuadora eléctrica, excepto la levadura en polvo y batimos hasta obtener una pasta líquida.
- Agregamos la levadura en polvo, volvemos a batir a velocidad media y colocamos la masa en un recipiente, la cubrimos y la dejamos fermentar durante 90 minutos.
- Calentamos una sartén al fuego. Es recomendable que no tenga adherencia, preferiblemente de Tefal.
- Tomamos una porción de nuestra masa, la ponemos en la sartén hasta que se dore y la retiramos (no le damos la vuelta al baghrir). Repetimos con el resto de la masa.
- Servimos con miel o mermelada y a disfrutar!!
Tip: No colocamos el baghrir una encima de la otra para que no se peguen.
Beghrir con leche
Ingredientes
- 2 tazas de harina.
- 1 taza de leche en polvo.
- 2 tazas de agua tibia.
- 2 yemas de huevo.
- 1 cucharadita de levadura instantánea.
- 1/2 cucharadita de levadura en polvo.
- Una pizca de sal.
Preparación
- Ponemos la leche y el agua en una cacerola sobre el fuego y mezclamos, luego agregamos la levadura instantánea con precaución de que la mezcla esté tibia y no caliente, luego añadimos la sal y el resto de los ingredientes gradualmente hasta obtener una pasta líquida y firme.
- Transferimos la masa a otro recipiente, la cubrimos y la dejamos fermentar durante 2 horas.
- Calentamos una sartén a fuego medio, echamos un poco de nuestra masa y la retiramos cuando se dore (sin voltearla). Hacemos lo mismo con el resto de la masa.
- Servimos con mantequilla o lo que más nos guste, y a comer!!
¿Sabías qué?
El baghrir es de origen marroquí, y que se hizo bastante popular en muchos de los países árabes vecinos. Se suele servir sobretodo en el desayuno con miel, aceite de oliva, mantequilla, mermelada… A veces con pasta de almendras.
En Melilla se le conoce como jeringo.